martes, 18 de septiembre de 2012

bruxismo musical

somos el comienzo, nada esperado,
del mundo básico y sus símbolos de fuerza,
no nos quieren los dioses, no sabemos comportarnos en el olimpo,
tragamos nubes y nos inflamos , llueve por nuestra boca y orejas,
el sol nos regala arco iris frescos, cerca de nuestra piel se pueden sentir,
agotando sus colores sobre nuestros contornos suaves, mientras caemos,
tenemos miedo al infierno pero no creemos realmente en el,
sabemos prender las antorchas de sangre que riegan la vida,
todo lo consumen, incluso el alma, quien sabe donde iremos a parar,
de tanto jugar con acordeones dentales hemos creado ese bruxismo musical,
 a los psicólogos le viene mal, dirán que estamos locos y descabellados,
como un espasmo vaginal en la cabeza,
que nos impide sentir el placer de esta,
nuestra pasajera existencia.